Escenario multicultural: eclecticismo del mueble en La Habana del siglo XIX a partir de referentes conservados en museos de la ciudad
Carrillo Álvarez, Indira
Especialista principal del Museo de Arte Colonial y miembro de ICOM-Cuba.
Registro e investigación de colecciones y curaduría de exposiciones. La Habana, Cuba.
carrilloindira1989@gmail.com

Etiquetas/Tags: Estilos artísticos, América, Mueble doméstico, Catalogación, Relaciones geográficas
En correspondencia con la temática “conexiones geográficas”, la comunicación propuesta tiene por objetivo principal demostrar la pluralidad de procedencias e improntas culturales que se expresaron en el mobiliario en La Habana del siglo XIX. Una introducción sobre las tendencias y exponentes precedentes, ejemplificados con piezas conservadas en museos de La Habana, sirve como preámbulo para arribar al análisis de muebles en el siglo XIX. Igualmente, el comentario pertinente sobre sucesos internacionales y nacionales que condicionaron la inserción y desarrollo de determinado mobiliario en Cuba, y particularmente en La Habana, procura argumentar el escenario multicultural que propició la diversidad del moblaje en el período. Al tiempo, se valora el apoyo teórico de documentos estadísticos y anuncios promocionales asociados al mobiliario en la época.
Se señala La Habana y el siglo XIX como marco geográfico y temporal, respectivamente, pues fue 1818 la fecha que representó el momento cumbre de las franquicias comerciales que desde el siglo precedente se fueron concediendo a la colonia. En ese año fue promulgado el libre comercio a Cuba con los mercados de otros países por Real Decreto de
Fernando VII. De modo que es durante el siglo XIX cuando se aprecia un intercambio más fluido de productos procedentes de diversos países a través de distintos puertos, entre los que destaca el puerto de La Habana, declarada oficialmente capital de la colonia desde 1589.
Así, la impronta cultural española, inglesa, francesa y norteamericana se visibilizó en La Habana y en el mobiliario de sus moradas; a la vez que se incluyeron aportaciones criollas al mueble en el contexto insular. Se importaron modelos que fueron imitados o modificados, se fusionaron elementos estilísticos y se adaptaron o reinterpretaron motivos decorativos. La aproximación se realiza entonces desde el estudio de piezas presentes en importantes museos de la ciudad, que atesoran colecciones significativas de mobiliario. Es el caso del Museo de Arte Colonial, la Casa de la Obra Pía, el Museo de la Ciudad, el Museo Municipal de Guanabacoa y el Museo Napoleónico.
En general, el análisis individualizado de los exponentes se hace necesario en estas instituciones, pues la mayoría de las colecciones atesoradas se conformaron empíricamente en décadas pasadas, con escasa información sobre las piezas y sin el rigor metodológico de la museología actual. De modo que se procura aportar a los inventarios de estos centros y a la documentación sobre el mueble en el territorio, mediante el análisis de un grupo de piezas, atendiendo fundamentalmente a las variables de estilo, materiales y técnicas. Estos elementos, así como la información de archivo que puntualmente aparece o se ha rescatado para los inventarios de estas instituciones respecto a la historia de algunos bienes, constituyen datos que permiten aventurarse a proponer procedencia geográfica para determinados muebles, o dilucidar rasgos asociativos con la impronta cultural de algún país en términos de moblaje.